Resumen
A semejanza de todo espacio de construcción social, la disciplina de las Relaciones Internacionales puede identificarse como un campo de fuerzas signado por conflictos de poder. De allí, que toda producción se conozca vinculada a un proceso de acreditación, esto es, un proceso mediante el cual los desempeños de los actores y sus productos –llámense conceptos, leyes o teorías- son contrastados con los parámetros ordenadores del campo socio-científico. El presente trabajo razona sobre el modo en el que las Relaciones Internacionales gestionan tal tensión entre producción y acreditación científica.